lunes, 3 de junio de 2013

Capitulo 5


Capitulo 5

Era el chico del supermecado ! El chico del supermercado le habia pegado a otro ! Y el otro es con el que yo me estaba besando… Significa eso que le gusto ?

Bueno, no estaba yo muy lucida en ese momento, creo que nunca volvere a tomar alcohol !

-          Estas bien ?- me pregunto Alex, acercandose a mi con cuidado y cogienodme por los brazos.

-          Si, yo solo… creo que  he bebido demasiado.- reconoci timidamente.

-          Bueno, la proxima vez o no bebas o no dejes que tu novio se aproveche.

-          En realidad no es mi novio, esto… yo, es… no le conoz… es complicado, Sabes?

En ese momento entro Lidia como un tornado subiendo por las escaleras y me grito:

-          Oh dios mio Bells no sabes lo que  acabo de hacer! Me vas a matar !

Yo le puse mala cara y seniale con el rabillo del ojo a Alex. Ella giro la cabeza lentamente hacia el chico y se me quedo mirando con cara de QueConoPasaConEsteTio. Para luego seguir hablando atropelladamente. No se habia dado cuenta de que era Alex !

-          En fin, que tus padres me han llamado y al principio me pregunte que que hacian llamandome a la una pero luego ,e di cuenta de que era por ti y nuestra pequena escapada y se lo termine cogiendo y…

Mis padres le habian llamado. Oh dios mio, estoy muerta. Lidia se lo habia cogido


Al poco tiempo sono la sirena de la policía y empezaron a gritar, conmocionados:

-          Redada policial!

Pero yo sabia que no lo era. Probablemente mi padre había sacado del trastero el viejo megáfono y lo había puesto a funcionar a toda marcha. Lidia me miro todavía sin entender porque no había empezado a correr. Yo le mire con cara de circunstancias y ella suspiro aliviada, al parecer le parecía mejor que fueran los reyes antes que la poli. A mi no. Me iban a castigar de por vida.

Mientras, Alex nos miraba. Parecia preocupado por nosotras, pero a la vez veía que le ocultábamos algo.

-          Teneis que salir de aquí, la policía entrara dentro de nada.

-          Oh, no. El padre de mi amiga es policía, no dira nada.- dijo Lidia, convenciéndome hasta a mi.

Pero Alex la miro mosqueada antes de asentir levemente y despedirse con la mano. Poco después entraron mis progenitores gritando. Lidia me dio un besos antes de salir por patas. Me había quedado sola.

-          Quien te crees que eres Isabella?!

Estaban enfadados, furiosos, ansiosos por tirarme la zapatilla. Y yo me iba a ganar el castigo de mi vida.

Era una estúpida princesa rebelde.